martes, 26 de febrero de 2008

Cara a cara tras 15 años

Anoche se llevó a cabo el tan esperado debate PP-PSOE, o Rajoy-Zapatero, como guste.
Lo vi. Lo vi y tengo mi propia opinión sobre cada uno.

En cuanto al candidato del Partido Popular, he de decir que me pareció inseguro acerca de lo que decía. No podía dejar de mirar el papel en el que, seguro, le habían escrito lo que tenía que decir. Le vi también un tanto agresivo. Utilizó el tema del terrorismo (vale, era parte de uno de los bloques), pero se excedió al acusar al presidente de "agredir" a las víctimas del terrorismo, acusación que Zapatero no aceptó.

En cuanto al candidato del Partido Socialista, le vi más educado y seguro de lo que decía, aunque es cierto que recurría demasiado al pasado en su enfrentamiento, cosa que, tratándose de esta legislatura (no la de hace cuatro años), me pareció innecesaria.

De nuevo regresando a Mariano Rajoy, me costó un poco entender sus miras hacia el futuro del final del debate. Pude apreciar un cierto tono homófobo y (es normal) cristiano. Decía que él quería que una niña (ojo, niña) naciera en una familia decente (he aquí la homofobia) y que tuviera una educación buena, no como la de ahora (cristianismo).
También me llegó bastante al alma que utilizara el concepto de "importación de delincuencia" al hablar de la inmigración. ¿Se trata de una mercancía para poder llamarla importación? ¿Y delincuencia? Habló de bandas organizadas sudamericanas. Cierto. ¿Y qué sucede con las bandas neonazis ESPAÑOLAS? ¿No son delincuentes? O peor, ¿no son acaso asesinos?

En fin, no creo que mi opinión dé para más. He de decir que Zapatero tuvo también sus incoherencias, pero, a mi juicio, supo medir mejor sus palabras. A Rajoy le vi más nervioso y, como ya he mencionado, algo agresivo.
Y, personalmente, me sorprendió que no se hablara del tema Iglesia-Estado, o Iglesia sin más. Supongo que no interesa.

Aunque, a pesar de todo esto, he de reconocer que me esperaba un debate más reñido y tenso. No ha sido así. Es cierto que los dos han sabido mantenerse en su sitio y sin faltarse al respeto en exceso. Ninguno de los dos abandonó el debate, como hizo José María Aznar en una ocasión.
El tema de ETA es otro cantar, presente también en la "lucha", del que otro día opinaré.

Si hay otra cosa en que no estoy de acuerdo, es en la ignorancia a otros partidos. Antes, el tercer partido por detrás de los dos grandes era Izquierda Unida. ¿Y ahora? He visto la publicidad y ni siquiera se emite ya su anuncio de campaña. Recuerdo hace cuatro años. Sí lo hicieron. ¿Ahora por qué no? ¿Por qué se nos conduce como borregos a un bipartidismo mayor? No lo entiendo. Sinceramente, no lo entiendo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias XOXO, me has hecho ahorrarme ver el debate xD. Te lo pagaré... en pipas! ♥

Qué vergüenza! Con lo que me gustaban a mi los anuncios de IU. Me acuerdo de uno en el que salía un perrete... qué amor!

En fin, nos vemos mañana. Ciaoo!

Anónimo dijo...

Más o menos es lo que opinamos la mayoría de los "no borregos" sobre el debate de ayer, yo creo que fue un poco vergonzoso porque nadie se mojó para nada. Esperemos que el siguiente sea más interesante y que tambien se trate el tema iglesia-estado, aunque no sé yo si les interesará demasiado sacarlo a ninguno de los dos, sobre todo en ésta época de elecciones, pero bueno, ¡confiemos!!.

En cuanto a lo de ignorar totalmente a los demás partidos es denigrante, ya que desde mis más antiguos recuerdos desde que empezó la democracia esto no había pasado nunca, así que mi opinión es que pasemos de ser "borregos" y "vicentes" (por aquello de donde va la gente...va vicente), y nos decidamos por una tercera opción, ya que ¡TAMBIEN LAS HAY!!, aunque interese demasiado ignorarlas y esconderlas. Según mi opinión esto es puro miedo... miedo a perder mayorías, pues sí, señores, no queremos mayorías absolutas bajo ningún concepto. Esta es mi opinión.

BESUKIS.