lunes, 13 de diciembre de 2010

Un nuevo proyecto


Lamento no haber dado señales de vida desde hace más de dos meses, pero estoy embarcada en un nuevo proyecto con dos compañeros de mi actual clase, ya 4º de Periodismo, este año en Bilbao. Hemos puesto en marcha un proyecto de varios blogs, con uno como base, pero todos enlazados entre sí: uno para vídeo, otro para audio y el más importante para texto, aunque queremos sacar edición impresa una vez al mes o cada dos meses con los principales contenidos en la web. Vamos, al revés de lo que se hace: generalmente, lo importante va impreso y se vuelca luego en la red. Nosotros al revés, lo importante está online, y el impreso lo utilizaremos como soporte para un resumen de lo hecho en la web durante un tiempo determinado (uno o dos meses).
Así pues, es posible que deje esto algo abandonado durante un tiempo, pero no penséis que estaré inactiva. De hecho, os hago saber las direcciones para que participéis activamente y, si alguien quiere colaborar, no lo dudéis, poneos en contacto conmigo o con cualquiera de los blogs:
Un saludo gente, y gracias por todo.
Tania

domingo, 3 de octubre de 2010

Cuando la prepotencia devuelve el golpe




Cuando parecía que nada podía rebajar aún más la popularidad de Zapatero, aparece por sorpresa algo que casi nadie esperaba: aquellas elecciones primarias del Partido Socialista de Madrid (PSM) que se anunciaron hace meses, que tanto barullo han armado y en las cuales casi todos esperábamos la victoria de Trinidad Jiménez... pues no. Ha ganado Tomás Gómez, ese pobre hombre al que Rodríguez Zapatero quería desbancar sin más y sustituirle por la ministra. Y tras las primarias, no queda mucho por decir. El secretario general ha ganado con un 53% de los votos, lo cual puede ser ajustado, pero es una victoria, y demuestra no tanto la preferencia de los madrileños por uno u otro candidato, sino las maneras y las formas en que se han desarrollado las campañas desde que el presidente del gobierno se pronunció para dar su apoyo a Jiménez.


Pero lo mejor para mí ha sido ver el discurso que ha dado la ministra de Sanidad después de su derrota. Ha intentado -que no logrado- transmitir felicidad por la victoria de Gómez, compañerismo y, lo que más gracia me ha hecho, unidad. Ha pretendido transmitir unidad. “Juntos hemos hecho del PSOE un partido más fuerte, más sólido y más unido”, ha dicho. No sé qué se entiende por unidad, pero, en mi opinión, el mero hecho de hacer que los militantes se decanten por uno u otro candidato de un mismo partido que “está completamente unido”, no implica precisamente unidad.
Pero lo que sí debería decirles alguien a los socialistas para no llevarse más decepciones es que no, desgraciadamente no van a ganar a Esperanza Aguirre.


Fuente: Generación Sin

viernes, 20 de agosto de 2010

Asuntos varios que comentar




Quería evitar por todos los medios escribir acerca de Pakistán, para no cabrearme. Pero al final no me ha quedado otra. No puedo creer que nadie esté haciendo nada. Las organizaciones internacionales dicen “Pobres” y prometen que van a ayudar, pero nadie va. ¿Qué pasa? ¿Qué hace falta para que actúen? 20 millones de personas (lo que viene siendo casi la mitad de España) han perdido TODO. 3,5 millones de niños pueden morir por enfermedades a causa de la falta de agua potable. Mientras tanto, la ONU solicita -atención, sólo solicita- 459 millones de dólares para ayudar a las víctimas, aunque por el momento sólo se han recaudado 125, que tampoco llegan. Estupendo, ¿qué necesitan los países de la OTAN para reaccionar? Ah, claro, lo había olvidado. Necesitan que sea una región con abundantes recursos naturales. Sino, da igual, que se pudran. Que esos niños se mueran de disentería y diarrea. ¡Qué más da! Por favor, qué son 3,5 millones de criaturitas al lado de los 6.000 millones de personas que somos en el mundo. Además, ¿de qué se quejan? Cómo si no muriera gente diariamente y cada segundo en África…
Hipócritas, son unos hipócritas. Como en Haití, que de repente… ¡puf! Se ha olvidado.
Otro asunto que me ha incitado a escribir ha sido la maravillosa decisión de “cara globo” -es un mote mío-, José Blanco. Sí, señores, que ahora nos van a subir los impuestos al nivel europeo -los salarios no, si no podemos comer da igual, pero pagaremos lo mismo que los europeos, aunque no cobremos lo mismo, hay que estar orgullosos-. ¿No se da cuenta este señor de que lo que pretende es un poco imposible? No hay dinero. Vale, pues que se lo quiten a los ricos, que es lo que iban a hacer, ¿no? Ah, no, que eso también ya se ha olvidado… Ahora pagamos todos un poco más. Excepto ellos, que se pasan la vida desgravándose lo poco que pagan a Hacienda. Pero, ¿cómo quieren que paguemos lo mismo que los europeos si precisamente es lo que no tenemos? Cómo pueden ser tan cínicos de decir que los impuestos deben ser como en Europa… ¡y los salarios no!
Por último, aunque podría seguir y seguir, quiero hacer mención al nuevo ridículo que ha hecho el Gobierno -y más concretamente el Ejército- de Israel. Supongo que sabéis a qué me refiero. Sí, lo de la chica esta, Eden Aberjil, ex soldado, que subió a su perfil de Facebook unas fotos en que salía con presos palestinos. Y encima tiene la prepotencia de decir que, si tuvieran Facebook, les etiquetaría. Yo no sé, pero me da la sensación de que el cinismo se está poniendo muy de moda. Y lo mejor de todo es que no pueden sancionarla porque, vaya por dios, acabó el servicio militar el año pasado y no ejerce. Es algo así como los políticos o los curas. Si lo hicieron cuando “trabajaban” en ello y ahora ya no están, el delito prescribe. Niños del mundo, tened cuidado, el clero acecha. Y obreros del mundo… revolucionaos por las malas, porque por las buenas nos van a dejar el trasero hecho añicos, y perdonen la expresión.


Fuente: Generación Sin

viernes, 30 de julio de 2010

Una "fiesta" sin futuro

Todos lo esperábamos, y finalmente sucedió. El miércoles por la mañana el Parlament de Catalunya votaba la prohibición de las corridas de toros en la comunidad. Y aunque el resultado fue el esperado, hay quien no terminaba de tenerlas todas consigo. Con 68 votos a favor, 55 en contra y 9 abstenciones, se consiguió poner fin a esta masacre que no tiene otro fin que divertir a un grupo de sádicos que disfrutan con la sangre. Hay quien preguntaba ayer que porqué no se ha decidido un término medio, es decir, como Portugal y algunas zonas de Francia, donde no se mata al toro, y se quejaba de que los abolicionistas no querían este término medio. Sin embargo, esta mañana escuchaba al torero catalán Serafín Marín decir que no, que él no estaría dispuesto a torear sin sangre, que la esencia estaba en la muerte –vino a decir eso básicamente, aunque un poco distorsionado por mí–. Pero sin manipulaciones, vino a decir que se negaba, que perdía “la gracia”. Bien, luego somos los antitaurinos los radicales.

Otro asunto que me hace bastante gracia es cuando ayer los protaurinos se pusieron como niños, diciendo que si se prohibían las corridas, también los correbous. Y no voy a decir lo contrario. Yo también creo que debería haberse prohibido todo de golpe, pero bueno, tiempo al tiempo. Sin embargo, me hace gracia que esas declaraciones vengan de los protaurinos, porque dicen algo como: “En los correbous también se tortura al toro, así que habría que prohibirlo”. Vale, ya están diciendo pues que en las corridas se tortura y se hace daño al animal. No sé, me parece gracioso que esas palabras vengan de alguien a quien le gusta la “fiesta nacional”. Hipócritas.

Y otro tema que no puedo ignorar es la politización tan absurda que se ha hecho de esto. A ver, la plataforma que llevó a cabo la ILP (Iniciativa Legislativa Popular) fue Prou!, que es exclusivamente antitaurina, no independentista, nacionalista, antiespañola, ni ninguna de esas cosas que se han dicho. ¿Que los diputados hayan votado en función de la ideología? Ni lo sé ni me importa. Sólo sé que se ha terminado con una masacre, una barbarie de la Edad Media, y me da absolutamente igual si es española, francesa o tailandesa. Y más aún si me hablan de la “identidad española”, ese patriotismo exacerbado típico del mismísimo Franco. Lo siento, señores, pero si ser española significa que aplauda a un cobarde por maltratar a un animal que se desangra, que baile flamenco en un tablao o que cuando salga del país me digan “Olé, olé, toros, flamenco y paella”… yo no soy española. O al menos no me lo siento. Porque España es mucho más que todo eso. No tengo nada contra el flamenco –y mucho menos contra la paella–, pero si destacamos, por ejemplo, un baile, como el flamenco, habrá que hablar también de las jotas –en todas sus variantes–, la sardana o el aurresku, y añadir todos los demás bailes populares de la península.
Pero bueno, quien quiera politizar la sangre, la tortura, el dolor o los derechos de los animales… que los politice.

Por último, sólo me queda desear suerte a los colectivos antitaurinos que ahora pretenden exportar esta ILP a Madrid, aunque es cierto que la cosa está más difícil por eso de que Esperanza Aguirre declaró las corridas Bien de Interés Cultural. Pero bueno, vale la pena intentarlo. Aunque también quieren enviarlo al Congreso de los Diputados, y es posible que ahí la cosa prometa.
Y voy a dejar un buen sabor de boca a los antitaurinos con esta última noticia: Los protaurinos dicen que hemos ganado la batalla, pero no la guerra, y pretenden acudir a Europa y, lo que es mejor, a la UNESCO, para que reconozca la tauromaquia como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Yo me río. A ver cuándo se entera el movimiento protaurino de que una catedral sí es arte, una escultura también. Cualquier construcción es arte. Pero es que ahí radica el quid de la cuestión: Arte es construir, no destruir.


FUENTE: Generación Sin

martes, 8 de junio de 2010

Votación que viene y va


El PP retrasa la votación antitaurina en Catalunya
. Bueno, pues nada, toca esperar otro mes, hasta el 15 de julio, para la tan esperada votación por la que, de aprobarse, desaparecerían las corridas de toros en la comunidad catalana. En principio se iba a producir mañana, 9 de junio, pero ya se ha encargado el Partido Popular de que no sea así.Luego son ellos los que critican a los demás partidos de hacer cosas inútiles en tiempos en que hay problemas más importantes, como la crisis. Yo no digo nada. Tan sólo que me parece un poco absurdo el recurso presentado ante el Consell de Garanties Estatutàries, alegando que “el Estado es el único órgano competente para poder regular los espectáculos taurinos”, sabiendo perfectamente que la regulación de los espectáculos públicos es competencia de la comunidad autónoma. Y me parece absurdo por eso mismo, porque está más que claro que el Consell va a rechazar esta petición. Pero bueno, es seguro que esto lo han hecho para retrasar la votación y “ganar tiempo”, aunque la verdad no sé para qué. ¿Qué quieren hacer? ¿Van a boicotear a CiU, a Catalunya en general? En fin.

Igual que el recurso que querían interponer ante el Tribunal Constitucional por violación del derecho de acceder a la cultura. Ahí tenemos otro matiz: lo que ellos consideran cultura y nosotros no. Además, ¡no tiene suficiente el Tribunal “intentando llegar a un acuerdo” sobre el Estatut como para meterles ahora otro tema, uno que además ni les va ni les viene! Bueno, ellos que presenten. Yo sólo puedo decir que por mucho que retrasen la votación, estoy contenta, porque no dudo del resultado. Confío plenamente en que los parlamentarios catalanes tengan un poco de sentido común, se hayan percatado de la falta de argumentos sólidos de los taurinos, que tengan en cuenta por primera vez en la historia el sufrimiento y el dolor de los animales, la tortura de la “fiesta” y voten a favor de la prohibición. Catalunya será la pionera, y detrás de ella irán todas las demás comunidades. Y por fin los defensores de los derechos de los animales podremos sonreír, sin necesidad de gritar nunca más “¡Abolición!”.

FUENTE: Generación Sin

sábado, 5 de junio de 2010

Macabro recordatorio




Han pasado unos cuantos años, pero a la vez parece que fue ayer, porque todo sigue igual. Y ya nadie se acuerda, o no quiere acordarse. Por eso escribo esto, para recordar los años del terror que vivimos y aún estamos viviendo aunque cerremos los ojos porque ya no hay repercusión mediática, excepto cuando sucede algo “muy importante” y las cámaras vuelven a acudir allí. Hablo de hace 9 años, y 7 años. Concretamente del 7 de octubre de 2001 y del 20 de marzo de 2003. ¿Ahora ya os suena de algo?

Sí, hablo de la invasión de Afganistán y la de Irak respectivamente. ¿Os acordáis? 11 de septiembre de 2001. Caen las Torres Gemelas de Manhattan a consecuencia de un atentado de Al Qaeda, encabezado intelectualmente por Osama Bin Laden, que es un tema aparte porque de repente ya no se habla de él. ¿Ha dejado de ser aquel terrible terrorista que iba a acabar con la paz mundial y por el que íbamos a morir todos? Se ve que ha colgado los hábitos de terrorista y se ha dedicado a vivir en una casita cerca de la playa observando el amanecer cada día.

Bueno, sigamos con el tema. Estados Unidos encuentra en esos atentados la excusa perfecta para entrar en Afganistán, cosa que llevaba deseando hacía tiempo, pero necesitaba, como siempre, una excusa. Y la tuvo. El 7 de octubre de 2001, las tropas estadounidenses entran en el país asiático a destajo, como siempre. El objetivo principal es encontrar a Bin Laden, y el siguiente, poner “paz” en el país, donde gobiernan los Talibán. Y ellos, cómo no, se sienten los salvadores del mundo, que tienen que poner paz donde sea, porque son ellos los “elegidos”. Bien. Consiguen acabar con el régimen con el apoyo incondicional de la UE, la OTAN y la ONU (cómo no) e imponer a Hamid Karzai, un presidente “provisional” que ponen ellos. Provisional, sí, durante tres años, pues hasta 2004 no se convocaron elecciones. Actualmente sigue siendo él el presidente, tras haber sido reelegido. Sin embargo, Afganistán sigue estando ocupada por tropas de la OTAN (incluida España), porque según ellos “aún no hay paz”. Claro, y piensan que nos lo vamos a creer. Lo mejor de todo es que hace tiempo dijeron que Bin Laden se perdió por Pakistán… Y de repente ahora tienen interés en entrar a ese país. Pues nada, a destrozar vidas y países, que es lo suyo.

Por otra parte, Irak está un poco más reciente. Ya sabéis la historia. Básicamente, el presidente George W. Bush atacó Irak el 20 de marzo de 2003 con la excusa de que Saddam Hussein tenía armas de destrucción masiva, y claro, Estados Unidos era quien debía intervenir, siempre salvando el mundo. Bueno, hubo guerra. Una terrible guerra que acabó el 1 de mayo del mismo año. También con el respaldo de la OTAN y la UE (sobre todo Tony Blair, de Reino Unido; y nuestro José María Aznar). La ONU lo condenó, diciendo que era una “guerra ilegal”, pero no hizo nada. Y esto de la “guerra ilegal” siempre me ha hecho mucha gracia. Como si las demás guerras no lo fueran, y fuese perfectamente legal matar gente, niños, mujeres, ancianos… civiles al fin y al cabo. En fin, el final lo conocéis: Saddam Hussein en la horca, el 30 de diciembre de 2006. Pero desde luego, lo mejor de toda esta historia era que no había armas de destrucción masiva. Bueno, una vez más, la excusa perfecta, aunque sea falsa.

En fin, sólo quería hacer un recordatorio de todo esto. Porque no ha acabado, porque mientras Estados Unidos sean “los buenos” para el resto del mundo, podrán seguir haciendo las barbaridades que hacen, y la gente se lo seguirá creyendo. Podrán seguir invadiendo países a su antojo. Ayer fueron Afganistán e Irak, pero en cualquier momento puede… de hecho, estoy segura, van a ser Irán, Pakistán o Siria. Irán el primero, bajo la excusa del “uranio enriquecido para fabricar una bomba nuclear”. Vale, y digo yo… ¿y qué? ¿No tiene acaso Estados Unidos una bomba (o más) y nadie le dice nada? ¿Qué pasa, son los únicos que pueden tener armas? Y lo mejor de todo es que la gente confía en ellos, la gente les cree. La gente piensa que tienen razón al invadir países porque son “terroristas”. Yo más bien diría que son “resistencia”. Es lo que intentan hacer también con Palestina. Israel son los buenos.
En fin, no hay peor cosa en el mundo que el terrorismo aceptado, el terrorismo “legal”, el
terrorismo de Estado.

FUENTE: Generación Sin

martes, 1 de junio de 2010

Israel, asesino terrorista

El ataque israelí a la flota que transportaba ayuda humanitaria a la franja de Gaza tuvo ayer sus peores repercusiones: manifestaciones en todo el mundo condenaban el ataque ante las embajadas o, en el caso de Madrid, ante el Ministerio de Asuntos Exteriores. El número de asistentes fue considerable, teniendo en cuenta la rapidez de la convocatoria (sólo desde la mañana), y pedían a gritos el levantamiento del bloqueo y la expulsión de la embajada de Israel de España. También se gritaba que todo lo que sucede en Palestina no es terrorismo, sino resistencia; y que los terroristas son los sionistas.

Se desplegó además una enorme bandera palestina, captada por los más importantes medios de comunicación. Ciudadanos de todas las nacionalidades, aunque más numerosas la española y la musulmana, respaldaron el acto, llamando asesino al Estado de Israel.

Ya expuesta la noticia, doy mi opinión, aunque creo que todos la conocéis. Yo estaba allí y yo también grité “asesinos” e “¡Intifada!”, y también me sentí hermanada con los palestinos y con todos los pueblos oprimidos del mundo. Ya está bien. Libertad. Y menos llamar terroristas a los que se rebelan contra la injusticia y la ocupación.

Boicot a Israel. Sólo puedo terminar con una reflexión: el antisionismo se lo ganan ellos solitos a pulso.


FUENTE: Generación Sin